La Ventana
El concepto elemental de una ventana es el de un cerramiento que aísla los espacios interiores de las inclemencias climáticas exteriores, deja entrar la luz natural que puede regularse con diferentes complementos (cortinas, persinas, cotraventanas, filtro solares, etc.) y controla con sistemas de herrajes las aberturas para la entrada de aire.
Para la carpintería o marco que contiene los vidrios y los herrajes, son frecuentes tres materiales básicos: PVC, aluminio y madera, siendo el primero el más utilizado en la actualidad.
PVC. Es un material de la familia de los termoplásticos que tiene una gran injerencia en distintos productos de la industria de la construcción, tanto en instalaciones sanitarias, eléctricas, diferentes tipos de accesorios y carpinterías para aventanamientos, entre otros.
Este material tiene una vida útil muy longeva y no requiere de ningún mantenimiento.
El PVC es el material que tiene mayor aislación térmica y acústica debido a su inexistente conductividad. Virtud que permite tener los coeficientes de transmisión térmica más inferiores respecto a otros materiales de origen metálico.
El diseño de las ventanas realizado junto a los vidrios a utilizar permite la mejor aislación acústica con una reducción de ruido que puede estar por encima de los 45 decibeles. Es un material bastante cálido, que no produce condensación en sus perfiles. Es un material muy simple de limpiar, solo con agua y jabón.
Aluminio. Material derivado de la Bauxita, el aluminio es un mineral bastante abundante en la tierra, un metal liviano muy utilizado en todo tipo de uso industrial.
En la construcción, su utilización es muy frecuente en carpinterías para aberturas, ya que carece de mantenimiento: un proceso de anodizado impide la corrosión y permite la adherencia de diferentes pinturas.
El aluminio aplicado en ventanas resiste la humedad, la radiación solar y diferentes ataques meteorológicos. Los perfiles de aluminio se adaptan a cualquier espesor de vidrio y complementado con sistemas de rotura de puente térmico (RPT) pueden ofrecer un aislamiento termoacústico apropiado para algunas latitudes.
Madera. Es un material natural, fibroso y de dureza relativa, de acuerdo a la especie de árbol a la que corresponde. Las carpinterías exteriores de madera garantizan un aislamiento optimo al frío y al calor, así como un aislamiento acústico de gran eficacia. Todas las maderas ofrecidas provienen de bosques gestionados sosteniblemente.
Vidrio. Es el otro componente fundamental para el funcionamiento del sistema aislante de una ventana, ya que debe ser resistente, tener una coloración adecuada y permitir el paso de la luz natural sobre todas las cosas.
El vidrio debe estar correctamente calzado, fijado con burletes o adherido con pegamentos especiales, requisitos fundamentales para lograr una correcta aislación térmica y un perfecto funcionamiento de las partes móviles de la ventana.
A los vidrios se les pueden dar tratamientos específicos para aumentar el aislamiento térmico, el aislamiento acústico, la seguridad y el resultado estético delos mismos.
